lunes, 11 de noviembre de 2013

Casa Lucio - Huevos Rotos.




Ya soy un poquito más mayor y este fin de semana me fui a Casa Lucio a celebrarlo. Habrá cosa más simple que unas patatas con huevos?? La verdad es que al lugar le precede su fama, conseguida con el paso de los años gracias a su plato estrella: los huevos rotos. Ya sabéis que se trata de unas patatas fritas con unos huevos por encima, que se rompen con cuchillo y tenedor, dejando que la yema cruda se mezcle con las patatas...una delicia.

Leí en foros que el lugar no merecía la pena y que vivía de las rentas, no obstante me atreví a realizar una visita y festejar mi cumpleaños en dicho lugar.

Al llegar, el garito está lleno de gente, no obstante buscamos al encargado y conseguimos reservar una mesa. Mientras nos pedimos algo de beber ya había sitio disponible, unos 20 min. El camarero que nos atendió no pudo ser más mal educado, aunque al final tuvo algún detalle...se le perdona.








La comida llegó pronto, se ve que habían hecho una buena "mise en place". Pedimos los huevos, una ensalada, pan de cristal, un solomillo de cerdo y unas berenjenas. Todo nos gustó y de precio no estaba nada mal, por lo que si queréis disfrutar de un lugar señero de Madrid, os lo recomiendo: id a casa lucio¡¡¡


miércoles, 6 de noviembre de 2013

Latineando:Juana La Loca versus Txakolina.




La semana pasada vine haciendo lo que en Madrid se llama "latinear" ´(Ir de cañas por el barrio de La Latina). Al calor de las buenas críticas elegí, de entre la gran oferta que ofrece el barrio, dos lugares: Juana La Loca y Taberna Txacolina. 






Juana La Loca es un garito que ha ido adquiriendo fama desde su apertura. Su pintxo de tortilla tiene bastante éxito. Lo hacen con cebolla caramelizada y dejan el huevo poco hecho. Cuando entré en el lugar me pareció acogedor y el personal bastante atento. Encontré una barra con expositores de pintxos todos muy apetecibles, de una ración bastante contundente y con ingredientes de mercado. En contra, su precio. Me pareció excesivo que cobren una media de 6-7 euros por uno de ellos. La tortilla estaba rica, pero desde luego no entendí la fama que había adquirido.





Taberna Txacolina en cava baja, está rodeada de una amplísima competencia. El local muy acogedor y sorprende mucho su barra de pintxos, todos ellos muy resultones, bien presentados y con buena materia prima. Me llamó la atención una enorme bola de patata rellena de carne y rebozada acompañada de una salsa con la que te vas bien cenado, desde luego que sí"
Yo me decanté por un delicioso pintxo de bacalao y por una croqueta de carrilleras: exquisitos ambos dos¡¡¡

En conclusión, me quedo con La taberna Txacolina o cualquier bar que la rodea a Juana la Loca que vayan los guiris...

Por cierto, os recomiendo "latinear" los domingos al mediodía después de un paseo por el rastro, así queda todo en casa.